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Auður Djúpúðga («la meditabunda») fue la única mujer que lideró una expedición para crear un asentamiento en Islandia.  Tenía fama de ser una mujer sin igual, previsora y sabia, como lo atestigua su apodo. Después de perder a su marido y a su único hijo, puso rumbo a Islandia junto con su tripulación. Se dice que su asentamiento se extendía por todos los valles de Breiðafjörður, en el oeste de Islandia. Auður era cristiana y se la consideraba una mujer particularmente noble y generosa. Otorgó a su tripulación grandes extensiones de tierras en su asentamiento y estableció su hogar en el solar actual de la iglesia de Hvammur en Dalir.

La heroína más infame de las sagas islandesas era decidida, hermosa y de larga cabellera. Hallgerd era extremadamente orgullosa y nunca aceptaba órdenes de nadie. Inició una disputa con su vecina Bergthora, y su marido, Gunnar, pagó con su vida por haberle dado una bofetada. Cuando se vio asediado por sus enemigos, Gunnar le suplicó a su mujer que le diera un mechón de pelo para reparar la cuerda de su arco. Ella se negó y dejó que lo mataran. Pero, ¿cuál es el origen de su apodo? Una explicación es que Hallgerd tenía unas piernas particularmente largas ( significa «pantalones largos»). Otra explicación alternativa es que el significado original de esta palabra es «de pelo largo».

¿Su apodo se refiere a un chal que llevaba sobre la cabeza o los hombros? Junto a su marido, Helgi Magri («Helgi el Inclinado»), Þórunn Hyrna se estableció en Eyjafjörður, en el noreste de Islandia, siendo la primera mujer en hacerlo. Þórunn era la hermana de Auður Djúpúðga, la más famosa de todas las colonas. Mientras Þórunn y Helgi navegaban fiordo adentro buscando un lugar para establecer su granja, Þórunn dio a luz a una hija en un pequeño islote del río Eyjafjarðará. Esta niña, Þorbjörg Hólmasól, fue la primera habitante nativa de Eyjafjörður.