Nochevieja en Islandia
Tradicionalmente, el Año Nuevo en Islandia es una combinación insuperable de deliciosos manjares, espíritu familiar y la felicidad que siempre da hacer explotar cosas.
Para celebrarlo como un verdadero islandés, qué mejor manera de empezar la noche que con una comida especial. Luego, alrededor de las 20:30 es hora de acercarse a la hoguera más cercana dando un paseo.
A medida que avanza la noche, oirá como va creciendo el alegre estruendo de los petardos que lanzan los más jóvenes, impacientes por la llegada de la medianoche, excepto durante una hora de silencio a partir de las 22:30, cuando todo el país se congrega delante del televisor para ver Áramótaskaupið, un resumen en clave de humor de los eventos más importantes del año. ¿Siente curiosidad por echarle un vistazo? Pues puede verlo desde cualquier lugar del mundo (con subtítulos en inglés) a través del servicio online de RÚV TV.
Luego, cuando el reloj da las doce, es cuando empieza todo: más de 500 toneladas de fuegos artificiales cubren el cielo en un espectáculo de luz y color.
Los servicios de búsqueda y salvamento locales venden fuegos artificiales en los días previos a la Nochevieja con el fin de recaudar fondos para la organización, por lo que los islandeses colaboran en masa, y se nota.
Abríguese bien para disfrutar de una magnífica vista de la capital inundada en luz desde la cima de la colina Öskjuhlíð o junto a la Hallgrímskirkja.
Foto de Ragnar Th. Sigurðsson / Visit Reykjavík.
Texto de Carolyn Bain y Sarah Dearne.