Vuelos a Seattle con aroma a Islandia

¿Dejamos las bromas sobre el tiempo? En Seattle llueve muchísimo (podemos hacer bromas con el tiempo porque somos islandeses). Pero tenemos que reconocer que las historias y leyendas de esta ciudad son impresionantes, y probablemente no existirían sin un poco de esa creatividad que traen los días de lluvia (estamos hablando de iconos locales como Jimi Hendrix, la música grunge y Starbucks, además de Amazon, Costco y Boeing).

En Seattle hay una interminable oferta de actividades para los días de lluvia, además de unos parajes naturales increíbles a la vuelta de la esquina. El futurista Museo de la Cultura Pop explora los sonidos de Seattle y el mundo de la ciencia ficción. El Chihuly Garden and Glass es una exquisita colección de cristal tallado a la sombra del Space Needle. Y, por supuesto, el Space Needle: disfrute de las vistas en todas las direcciones desde este enorme platillo volante.

En todas las direcciones puede verse un paisaje impresionante: el monte Rainier hará de impresionante fondo para sus fotografías del skyline de la ciudad. Hay parques por todas partes, costas que explorar y actividades a la vuelta de la esquina. Una opción barata pero que merece la pena es tomar el ferry que lleva a las islas cercanas a través del estrecho de Puget, y la península Olímpica está a un tiro de piedra.

Y si sigue teniendo teniendo ganas de explorar, desde Seattle a Vancouver, Canadá, solo hay que conducir un corto trayecto en dirección norte. ¿Y por qué no hacer una visita a Portland, Oregon? Solo está a unas cuantas horas en coche y ofrece un gran número de parques, fábricas de cerveza y otras actividades nada convencionales. ¿Le apetece hacer un viaje por carretera? ¿Por qué no vuela a Seattle y conduce hacia el sur hasta llegar a San Franciso o Los Ángeles?